
Desde el jueves 16 al miércoles 22 de septiembre se celebró en todo el mundo la Semana de la Movilidad Sustentable. Esta iniciativa busca promover alternativas de transporte que aporten a la construcción de un ambiente más amigable, y a la vez, que aporten al desarrollo sostenible con el uso y la apreciación del espacio público por parte de los ciudadanos. Entre las principales opciones se encuentran el uso de la bicicleta y la caminata.
Por un lado, la bicicleta es un medio de transporte económico, ecológico y saludable, mientras que las y los peatones constituyen el grupo más grande de usuarios de la vía. Se entiende como uno de los desafíos actuales el hecho de incorporar a peatones y ciclistas dentro del entramado vial ante un tránsito urbano que se caracteriza por darle prioridad a los vehículos motorizados.
Por otra parte, en cuanto a peatones, cabe destacar que la caminata es la forma más usada de transporte en las zonas urbanas de todo el mundo. Todas las personas en algún momento son peatones, y la negociación del espacio con el resto de los usuarios es constante.
La bicicleta, para finalizar, genera beneficios para la salud mental y física. Al igual que sucede con los peatones, es importante que las y los ciclistas se reconozcan como actores del entramado vial y cumplan con las normas de tránsito.